JetSMART no descarta una filial en Ecuador, así lo comentó en entrevista exclusiva el CEO Estuardo Ortiz, quien pone la lupa en la simplificación regulatoria propuesta por la autoridad aeronáutica ecuatoriana.
La compañía aérea confirma un desempeño positivo en la ruta Quito, como su único actual destino en Ecuador, pero condiciona una expansión mayor a la reducción de tasas y a una mayor libertad operacional.
JetSMART estudiaría una filial en Ecuador
La aerolínea ultra low cost JetSMART mantiene su mirada fija en Ecuador. Aunque actualmente opera únicamente la ruta hacia Quito, Estuardo Ortiz, CEO de JetSMART, confirmó que el balance de esta operación es «positivo» y no descartó la posibilidad de establecer una filial local en el país si las condiciones regulatorias avanzan hacia la simplificación.
La compañía aérea, que ya cuenta con filiales en Chile, Colombia, Argentina y Perú, ve en el mercado ecuatoriano un potencial que podría desatar una nueva etapa de crecimiento a partir de 2026.
El factor regulatorio como catalizador
Al ser consultado durante el ALTA Forum en Lima sobre si existe un análisis para generar una filial directamente en Ecuador, Ortiz vinculó directamente la decisión de expansión con la velocidad y flexibilidad de los cambios normativos que implemente el país.
El ejemplo clave para la aerolínea es Argentina, donde la simplificación regulatoria se tradujo en un crecimiento del 100% de JetSMART en el último año. «Yo creo que vamos a ir trabajando muy de cerca con la autoridad. Creo que es el camino correcto, el camino de hacer más simple y facilitar una operación en Ecuador, dando más libertad», señaló el CEO.
La clave de la propuesta ultra low cost radica en que un operador pueda tener base y volar «a cualquier otro» país con requisitos simples. Cuando se le preguntó si esta opción se está analizando con mayor profundidad, la respuesta del líder de JetSMART fue contundente: «Sí, lo vamos a ver, sin duda.»
Las tasas de embarque
Estuardo Ortiz fue enfático al explicar el principal obstáculo para su modelo de negocio: los impuestos y las tasas de embarque.
«Nuestra propuesta es de precios bajos… lo que buscamos es llevar la aviación a la gente que no viaja o viaja poco, no sacar participación al competidor, y eso solo se logra si lo que paga la gente es poco», explicó.
El problema radica en que, en algunos mercados, la parte del costo total que no va a la línea aérea —sino al Estado en forma de tasas o impuestos— puede llegar a ser el 50% o 60% del valor total del pasaje. Por ello, el mensaje a las autoridades ecuatorianas es claro: la reducción de tasas de embarque y la simplificación regulatoria son indispensables para que la aviación de bajo costo pueda desarrollarse plenamente en el país, impulsando la conectividad y el ingreso de nuevos pasajeros al sistema.
Y, ¿Guayaquil?
Respecto a la ciudad de Guayaquil, Ortiz admitió que, si bien el crecimiento de la flota en 2025 se ha enfocado en mercados prioritarios como Argentina y Colombia, esto no significa que se haya descartado a Ecuador.
«No, no, por supuesto que no, no podemos descartar nunca ningún mercado. La región cambia rápidamente… JetSMART está sujeta a tantas variables que siempre [mantenemos] mucha flexibilidad operacional para explorar oportunidades, y una de ellas potencialmente puede ser Ecuador», concluyó, dejando la puerta abierta a que una mejora en las condiciones regulatorias y de costos impulse la creación de la ansiada filial ecuatoriana y su regreso al José Joaquín de Olmedo desde Lima.
La aerolínea sigue de cerca los cambios implementados por la autoridad aeronáutica del país, confirmando que el futuro de la JetSMART Ecuador depende de qué tan simple y atractivo se vuelva el mercado para la inversión ultra low cost.
¿Veremos despegar esta idea? Estén atentos al futuro.
