IATA: en 2026, negocio de récords y márgenes microscópicos

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La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) ha publicado sus últimas previsiones financieras, ofreciendo una visión clara de lo que le espera a la industria aérea en 2026.

El titular es de estabilidad: la rentabilidad se mantiene y se esperan récords históricos en volumen. Sin embargo, al desglosar los números, queda claro que las aerolíneas operan en un entorno de márgenes extraordinariamente ajustados, luchando contra vientos en contra persistentes como la escasez de suministro y los costos crecientes.

En resumen: La industria se consolida en números negros con una ganancia combinada de $41 mil millones, pero el margen de beneficio neto se estanca en el 3.9%.

El 2026 tendrá números históricos

El 2026 se perfila como un año sin precedentes en volumen de actividad, superando con creces los niveles pre-pandemia y marcando la resiliencia del deseo global por viajar.

Indicador clave Proyección 2026 Cambio vs. 2025
Total de Pasajeros 5.2 mil millones +4.4%
Factor de Ocupación 83.8% Continuo récord alto
<Ingresos Totales $1.053 billones +4.5%
Beneficio Neto (Total) $41 mil millones +3.8%

La Realidad del margen: $7.90 por Pasajero

El dato más impactante para entender la naturaleza de este negocio es el beneficio real por unidad. Aunque $41 mil millones suena a una cifra astronómica, repartida entre miles de millones de transacciones y millones de activos, el beneficio neto por pasajero esperado en 2026 es de solo $7.90 USD.

Como bien comento el Director General de IATA, Willie Walsh, esta ganancia unitaria es minúscula comparada con otras industrias, enfatizando la necesidad de que la cadena de valor reconozca el valor que las aerolíneas aportan (que respalda el 4% del PIB mundial).

Los grandes desafíos y costos operativos

A pesar de los vientos de cola del lado de la demanda, la IATA subraya que los costos operativos y las limitaciones externas mantienen el margen de ganancia bajo presión extrema.

El panorama de costos está cambiando drásticamente:

  • Laboral: Se espera que asciendan a $729 mil millones (+5.8%). La mano de obra se ha convertido en el mayor componente de costos (28%) debido al crecimiento salarial y la necesidad de restaurar la capacidad laboral a los niveles pre-pandemia.
  • Costos de combustible: Se espera que los costos de combustible disminuyan ligeramente a $252 mil millones debido a una caída en los precios proyectados del petróleo ($90/barril a $80/barril).
  • SAF: Las compras de Combustible de Aviación Sostenible (SAF) se dispararán a $4.5 mil millones, un componente esencial, aunque aún bajo, de la factura total de combustible (0.8%).

La principal restricción operativa y financiera que enfrenta la industria es la fragilidad de la cadena de suministro global, que se manifiesta en dos áreas clave:

  • Entrega de aeronaves: Los retrasos y el backlog en la entrega de nuevos aviones por parte de los fabricantes no permiten a las aerolíneas capitalizar plenamente la fuerte demanda.
    • La industria aérea necesita más de 5.300 aviones.
    • Hay más de 17.000 aviones en espera por ser producidos.
    • La edad de los aviones pasó de 13.4 años a 15.1 años de edad desde la pandemia.
    • La escasez de piezas de repuesto sigue afectando el mantenimiento y el tiempo de inactividad de las aeronaves.
  • Carga regulatoria: IATA señala la «significativa» carga de costos regulatorios, mencionando intentos de reforma en Europa (sobre el equipaje de cabina) y la necesidad de los reguladores de actuar sobre las recomendaciones de la OACI.

Finalmente, la infraestructura sigue siendo un cuello de botella. Las restricciones de capacidad en el tráfico aéreo y la incapacidad de algunos aeropuertos (mencionando a Heathrow) para implementar reformas de costos ponen en riesgo la competitividad. Además, los conflictos geopolíticos obligan a desviar rutas (cierre de espacios aéreos), aumentando costos y reduciendo la eficiencia.

El 2026 será un año de estabilidad financiera y un testimonio de la demanda implacable de la conectividad aérea. Sin embargo, las cifras de IATA son una llamada de atención. Mientras que el sector genera miles de millones en ingresos, los márgenes permanecen críticamente estrechos, lo que hace que la industria sea «sensible a los choques». La capacidad de las aerolíneas para mantener estos niveles de rentabilidad dependerá de cómo la cadena de suministro se recupere y cómo se gestionen los crecientes costos laborales y regulatorios.

¿Qué opinas sobre estas proyecciones? ¿Serán los retrasos en las entregas de aviones el principal factor que afecte los precios de los boletos en 2026?

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